El primer disco adulto que tuve en mis manos, junto a los discos de Timbiriche, Parchis, los cuentos de Walt Disney, Cri-Cri y los varios volúmenes del festival Juguemos a Cantar, fue uno de John Lennon, no recuerdo si era de mis padres y por alguna extraña razón me lo agencié o de plano si pedí que me lo compraran por la caricatura que tenía en la portada, caricatura que, por cierto, dibujé y dibujé durante años y años y para ser honesto, de vez en cuando en alguna servilleta la sigo dibujando, caricatura que también fue un poster en mi recámara y una camiseta que compré en Coyoacán hace mil años y que a la segunda lavada dejó de parecer Lennon para convertirse más bien en una especie de zanahoria.
Después ya en plena adolescencia descubrí la forma en que Lennon había muerto, me causó un gran impacto, mi mente adolescente no entendía bien a bien la maldad humana, la locura gringa, el fan enfermo, el acosador, etc. El caso de Mark David Chapman fue mi primer encuentro con el asesino psicópata y me costó años entenderlo, al grado de coleccionar fotografías y recortes de periódicos del edificio Dakota (cuando no había internet). No entendía porque un ser humano podía matar a otro, simplemente porque sí. No se preocupe querido lector, ahora es algo que ya entiendo y que los noticieros y Hollywood se han encargado de explicarme.
Posteriormente, ya en la preparatoria y después de leer “the catcher in the rye” por instrucciones de nuestra maestra de literatura, volvió ese interés por el caso Chapman-Lennon y de nuevo regresó a mi mente, a darle vueltas y vueltas, al grado que me lo chuté varias veces porque no me cabía en la cabeza que este libro de J.D. Sallinger hubiera estado relacionado con diferentes asesinatos. Sin duda el morbo me llevó a revivir el tema.
En fin, no puedo decir que me duele la muerte de Lennon, la verdad es algo con lo que crecí, no puedo opinar si Yoko fue la que dividió a los Beatles porque cuando nací ya se habían separado, lo que si puedo contarles es que Lennon por alguna u otra extraña razón, siempre ha estado dando vueltas por mi vida, sus canciones, su vida, si historia y un día como hoy no debería dejarlo pasar. Un saludo querido lector y espero que empiece con el pie derecho este maratón Guadalupe-Reyes.
P.D.: Pedro, si llegó a su meta el Teletón... ja!
3 comentarios:
La versión nerd/computarizada del dibujo de Lennon ((°L°))
Yo le entré mucho más tarde a la onda Beatle, pero puedo decirte que de todos los conciertos que he visto en mi vida (que tu sabes que han sido muchísimos) este año ver a Mac Cartney (alias el Maca) fué de los mejores momentos vividos, de los mejores conciertos que he visto, top 3 sin duda.
Esta onda de entrarle tarde a Beatles me dió un panorama más grande de saber todo lo que hicieron en sus tiempos, sin duda maravilloso, sus diferentes etapas, sus ácidos y sus fresadas. No se si soy una persona más Maca que Lennon, eso da lo mismo, hay canciones de Lennon que me mueven mucho, otras de Maca que son maravillosas, lo que sí es que seguro este mundo extraña a Lennon, le hace falta, nos dejaron a su wannabe que se llama Bono y no le llega ni a los talones.
Saludos
Isaac:
Y si Lennon hubiera cantado en el Teletón...
Sí, Isaac, Sergio, yo de los Beatles lo que cada vez me doy cuenta es que hicieron un chorro en un muy poco tiempo.
Los cuatro muy talentosos, no creo que se lo hayan propuesto, simplemente se conjugaron cuatro estrellas, ...y luego cada uno por separado pues siguió brillando.
Yo tampoco entiendo el porqué lo quisieron matar y mataron. Mi tesis, es que somos -como raza "humana"- más pendejos que malvados. Pero que lo primero puede llegar a hacer tanto o más daño que lo segundo.
Sin duda Pedrito, estamos rodeados de pendejos, el pex es que son muchos y no hay como defenderse de ellos y aquí tengo que citar a un filósofo mexicano:
"Igual te jode el que lo hace a propósito que el que lo hace por pendejo"...
Sabias palabras de mi sweter.
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